Brotes tiernos: verdura fresca todo el año Artículo Publicado el 27.02.2013 por Javi
Cultivar brotes tiernos en macetas es muy fácil, en el balcón, en la terraza o junto a una ventana podemos crear un pequeño huerto de plántulas que nos aportarán verdura fresca durante todo el año. Además unas bonitas macetas desbordantes de brotes tiernos son un gran elemento decorativo. Vamos a conocer algo más sobre los brotes tiernos.
Todos conocemos las verduras y también las semillas germinadas, los brotes tiernos se encuentran justo entre los dos. La idea de usar brotes tiernos en la cocina nació en Estados Unidos pero se ha extendido y ahora los cocineros de todo el mundo ofrecen platos con brotes tiernos como ingredientes.
A diferencia que en los germinados donde se consume todo, raíces, semilla y germen, en los brotes tiernos sólo se consumen los tallos y las hojas. Se cortan los tallos y las hojas con tijeras y se deja la raíz para que pueda volver a brotar, lo cual nos permite realizar varias cosechas de brotes tiernos en cada siembra. Los brotes tiernos tienen más sabor que las semillas germinadas, dulces, picantes, aromáticos, su sabor ya presenta atisbos de la verdura adulta.
Las semillas sólo necesitan calor y agua para germinar, los brotes tiernos en cambio precisan de un soporte que le aporte nutrición a la planta. La semilla se sirve de sus propias reservas hasta que despliega los dos primeros cotiledones, más concretamente cuando los cotiledones comienzan la fotosíntesis, a partir de ese momento ya precisa tomar nutrientes del suelo. Prepararemos un soporte de sustrato de unos 4 cm de profundidad, ello nos permite usar casi cualquier recipiente para sembrar las semillas. Decorativos, recuperados y reciclados, cualquier cosa que se nos ocurra nos puede servir como contenedor. El único requisito es que tenga, o le podamos practicar, orificios de drenaje.
La mayoría de los vegetales que cultivamos son adecuados para su consumo como brotes tiernos, así como hierbas aromáticas y la mayoría de las coles. Estas son algunas de las especies que puede probar: col rizada, col roja, brócoli, rábanos, mostaza, alforfón, trigo, maíz, remolacha, acelga, lino, perejil, albahaca, cebollino, guisantes, trébol, berro, hinojo, espinacas, todas las lechugas … Las plantas que debemos evitar consumir como brotes frescos son todas las solanáceas, tomate, patata… pues sus hojas son venenosas. En cuanto a las semillas sólo hemos de usar las destinadas exclusivamente para este tipo de cultivo o las semillas destinadas a la agricultura ecológica. Las semillas que se venden en sobres en los centros de jardinería llevan un tratamiento antifúngico con productos químicos.