Características clave del jardín de invierno Artículo Publicado el 22.07.2022 por Flavia
El invierno es, sin duda alguna, la época del año a la que poco le prestamos atención al jardín. Sin embargo, tiene para ofrecernos numerosos árboles, arbustos y plantas con flores. Veamos a continuación algunas características clave del jardín de invierno para que puedas disfrutar plenamente del jardín durante esta estación.
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Color
Las plantas ofrecen una gran variedad de color desde junio hasta septiembre en el hemisferio sur y desde diciembre hasta finales de marzo en el hemisferio norte. Los tallos suelen ser una característica dominante y proporcionan color naranja, rojo, verde, amarillo, entre otros, así como también una sucesión de bulbos. Los árboles también juegan un papel importante: sus cortezas ornamentales muestras distintas tonalidades de caoba, cobre, ámbar, rosa cálido y amarillo. El Acer capillipes, prunus serrula, acer griseum y betula utilis albo sinensis cuentan con esos colores respectivamente.
Si quieres tener color en tu jardín de invierno, el mejor consejo es sembrar cornejos, sauces y zarzas que se podan a principios de la primavera para proporcionar un nuevo crecimiento coloreado la próxima temporada.
Aroma
El jardín de invierno está lleno de arbustos que largan su bello perfume para atraer una gran cantidad de insectos polinizadores. Mahonia, daphne, madreselva, hamamelis, sarcococca y viburnum son tan solo un par de ejemplos de plantas que proporcionan lindos aromas que van desde la almendra hasta especias dulces. Los aromas persisten en el aire.
Estructura
Los setos de hoja perenne brindan un fondo de color verde oscuro para las plantas más coloridas y también envuelve sus aromas. Las ondulaciones crean valles pequeños. Un marco de árboles sembrados estratégicamente proporcionará puntos focales en todo el jardín de invierno y brindará altura e interés estacional con sus maravillosas flores y corteza.
Flores
Una enorme sucesión de flores inicia en junio en el hemisferio sur y arranca en diciembre en el hemisferio norte. Esto se debe a la inclusión de variedades de viburnum, hamamelis, madreselva y mahonia, como así también plantas herbáceas como el eléboro y bulbos como los acónitos de invierno, campanilla de las nieves y narcisos.
