Características de la orquídea Dendrobium compactum Artículo Publicado el 29.06.2017 por Javi
La orquídea Dendrobium compactum es originaria del sudeste asiático y destaca sobre todo por su belleza, el gran número de flores que produce y por su rápido crecimiento. No es una de las orquídeas más fáciles de cultivar pero si respetamos sus características y le ofrecemos las condiciones que necesita podemos cultivarla sin grandes problemas.
La ubicación y la temperatura son tal vez las condiciones más importantes a la hora de cultivar la Dendrobium compactum. Necesitará un clima suave pues es una orquídea epífita que crece en una zona geográfica con solamente dos estaciones. En la estación lluviosa, verano, la temperatura media gira en torno a los 25ºC y en la estación seca la temperatura al principio ronda los 19ºC y después asciende ligeramente. Esta orquídea florece al final del invierno pues necesita temperaturas bajas para hacerlo.
La Dendrobrium compactum necesita una muy buena ventilación. Algunos cultivadores llegan a usar ventiladores para mantener las raíces secas. El riego de esta orquídea debe ser muy diferente en su fase de reposo y en su fase de crecimiento. En la fase de crecimiento, cuando la planta emite nuevos brotes y aparecen nuevas raíces, necesita mucha agua al principio del día pero teniendo en cuenta que al acabar el días sus raíces deben estar perfectamente secas. Es cuando suelen usarse los ventiladores o colocar la planta en un lugar bien ventilado.
En la fase de reposo los pseudobulbos ya se han desarrollado. Esta fase se inicia al final del verano o principios del otoño. Durante los tres primeros meses de esta fase debemos regar sólo una vez a la semana. La planta absorbe mucha menos agua en esta fase por lo que tendremos cuidado con que no quede agua encharcada. En los tres meses siguientes dejaremos de regar por completo. Aún así hay que mantener una tasa de humedad ambiental bastante alta. Para ello podemos usar una botella con spray o poner un recipiente con agua cerca de la planta.
Cuando vuelve a comenzar la fase de crecimiento hay que tener mucho cuidado con el riego. Lo introduciremos de forma progresiva, primero con la botella con spray y después regando con mucho mimo para no empapar excesivamente el sustrato. En cuanto veamos que las raíces están bien desarrolladas podemos seguir regando como habíamos descrito anteriormente. La humedad ambiental es muy importante para la Dendrobium, hay que tener en cuenta que en su medio natural crece con tasas de humedad del 70-80% en la época de lluvias y 50-60% en la época seca.
El mejor momento para usar el abono con esta planta es lógicamente durante la fase de crecimiento que es cuando necesita más nutrientes. Durante esta fase también necesitará mucha luz aunque siempre será indirecta pues no tolera el sol directo. La Dendrobium compactum puede cultivarse sobre troncos o en macetas o cualquier sistema habitual de cultivo de las orquídeas epífitas. Hay que usar siempre un sustrato adecuado para orquídeas y cuanto más grueso mejor pues nos facilitará el secado de las raíces.
Es en definitiva una orquídea que precisa unos cuidados particulares, que tampoco es que sean excesivos, pero sin los cuales no tendremos posibilidades de éxito. Una orquídea que nos exige un poco de paciencia y meticulosidad a la hora de cumplir sus expectativas pero que nos regalará con una impresionante floración.