Cómo crear un jardín rústico en 6 pasos Artículo Publicado el 07.10.2015 por Javi

Crear un jardín rústico es una experiencia muy gratificante pues no exige tanto trabajo ni dedicación como un jardín formal en el que hay que trabajar mucho más el diseño y el mantenimiento. Un jardín de estilo rústico es relajante y divertido, lleno de color y formas que transmiten naturalidad. No hay normas estrictas para su creación y podemos adaptarlo con plena libertad a nuestro gusto personal y a las circunstancias particulares de clima y suelo. Con este artículo queremos que tengáis una buena guía para conseguir un jardín rústico de bajo mantenimiento.

1.- Comenzar por un jardín pequeño y manejable que nos permita dedicarle un poco tan sólo de nuestro tiempo de ocio. Poco a poco conforme vayas cogiendo confianza y conocimientos podrás ir ampliándolo.

2.- Preparar el suelo a conciencia. Aunque resulte un trabajo pesado y poco gratificante a corto plazo contar con un buen suelo es el mejor de los comienzos para tener un buen jardín rústico. Comenzar por un análisis del suelo y añadir una buena cantidad de materia orgánica serán fundamentales.

3.- Correcta planificación para el cultivo de cada planta. Hay que conocer bien las necesidades de cada especie que queramos cultivar y plantarla en el lugar del jardín más adecuada para ella. Este punto nos ahorrará mucho trabajo posteriormente.

4.- Selecciona especies resistentes. Hay muchas especies de plantas que reúnen belleza, tanto floral como foliar, con una elevada resistencia a las enfermedades y las plagas. Es cuestión de investigar un poco y no dejarse guiar exclusivamente por la estética de cada planta.

5.- Echa mano de un buen acolchado. El mulching ayuda a mantener los niveles de humedad del suelo y evita que crezcan malas hierbas. Además si usamos algún material orgánico, cortezas, compost u otros, conseguiremos con su descomposición que mejore la calidad del suelo. También contribuye a que el jardín tenga un aspecto más limpio y uniforme.

6.- Riego automático. El riego por goteo programado no es sólo una gran forma de ahorrar agua, además nos permite ahorrar muchísimo tiempo pues no hay que olvidar que el riego es una de las tareas de mantenimiento que más tiempo ocupan.

Veamos ahora algunos consejos que nos pueden ayudar a mejorar el diseño y por ende el aspecto de nuestro jardín de estilo rústico. Piedras y vallas de madera son un elemento a tener en cuenta para crear un aspecto salvaje y natural en nuestro jardín.

Algún elemento extraño a lo que esperamos ver en un jardín se convierte en un punto focal que atrae la mirada del visitante y mejora la decoración del conjunto. Una pequeña carretilla, un carrito, una cesta o lo que se nos ocurra puede ser un elemento decorativo muy interesante. Incluso podemos usarlo como contenedor para integrarlo todavía más en el conjunto.

Las plantas perennes de larga duración son una interesante opción que nos permite tener una base fija que sostendrá el peso de la decoración del jardín. El Melampodium, en cualquiera de sus especies, es un buen ejemplo. Ofrecen una larga floración estival y después en invierno siguen siendo muy decorativos con sus vainas cargadas de semillas. Se reproduce por sí misma sin llegar a ser invasiva y son plantas muy resistentes.

Construir un camino de jardín es una gran idea que permite separar espacios y comunicar las diversas zonas del jardín. Su construcción es un buen momento para incluir piedras, madera y otros materiales duros que contrasten con la suavidad de las plantas.