Cómo hacer florecer un cactus de Navidad Artículo Publicado el 02.12.2021 por Flavia
El cactus de Navidad es una de las suculentas preferidas por muchos. Sus flores vibrantes emergen de los zarcillos que cubren la planta y se arrastran para que luzca mucho más atractiva. Sin embargo, a veces, pueden no florecer y debes descubrir cómo forzarlas para que lo hagan. Si tienes un cactus navideño y aun no ha desarrollado flores, en este post te diré cómo puedes hacer para que suceda.
El cactus de Navidad, también conocido como cactus de Acción de Gracias, posee necesidades de cuidado muy distintas en comparación con sus familiares del desierto. Esta planta prospera en condiciones mucho más tropicales, por lo que prefiere una mezcla para macetas rica y orgánica, luz brillante e indirecta y agua.
Su época de floración aparece en otoño, generalmente a mediados del mismo. El truco para que florezca se reduce a tres factores: luz, riego mínimo y temperatura.
Por tanto, limita la cantidad de agua que suele recibir tu planta al iniciar el otoño y riega solamente la capa superior del suelo, es decir, los primeros tres centímetros. Riega solo cuando esté seca al tacto. Esto obligará a la planta a entrar en el período de inactividad
Proporciónale 12 horas de oscuridad a diario, preferiblemente en una habitación fresca para que pueda iniciar su período de floración. Si no puedes mover al cactus, cúbrelo alrededor de las 18 hs y destápalo a la mañana siguiente. Haz esto durante seis semanas aproximadamente para promover la producción de botones florales.
Donde sea que vayas a guardar a tu cactus de Navidad, no enciendas las luces para no romper con ese ciclo de oscuridad requerido. La temperatura ideal para que florezca ronda 10-12 ºC.
A diferencia de otras suculentas, los cactus navideños pueden florecer otra vez en primavera si le proporcionas 12 horas de luz solar y 12 horas de oscuridad. Haz esto durante seis a ocho semanas o hasta que surjan los brotes.
Una vez que aparecen los brotes, las flores demoran hasta doce semanas en crecer. Cuando florezca, trasládala a un sitio donde reciba luz solar brillante e indirecta y esté alejado de las corrientes de aire; aumenta el riego mientras florece.
