Cómo plantar una semilla de mango Artículo Publicado el 21.09.2012 por Javi

El mango es el fruto del árbol llamado científicamente Mangifera indica; aunque también se le llama mango al árbol que produce dicho fruto. Es una especie originaria de la India y pertenece a la familia de las anacardiáceas. El fruto presenta una gran semilla en su parte central. Muchas veces, al comer esta fruta, me he quedado con las ganas de saber si se podía usar o no esa semilla. Y al fin he descubierto que sí se puede, a continuación os detallo la manera de plantar una semilla de mango.

Esta es la plántula que crece de la semilla del mango al cabo de unas ocho semanas. Hay que tener en cuenta que el mango, en condiciones ideales, puede llegar a los 3o metros de altura. Es además un árbol muy agresivo que busca la luz desesperadamente, aun a costa de los vecinos, desarrolla ramas para quitarles el sol. Por ello, a menos que contemos con una parcela muy grande, será mejor limitar su crecimiento cultivándolo en maceta.

Esta es la parte central del fruto y ahora hemos de proceder a extraer la semilla del interior de esta coraza protectora. Son admirables las estrategias que ha ido creando la evolución para proteger la reproducción de algunas plantas. La coraza protege a la semilla para que no pueda ser comida por los animales.

Con un cuchillo grande de cocina cortaremos la parte más estrecha y aguda de la coraza, actuaremos con cuidado pues es realmente dura. No me canso de insistir en la seguridad, tomaremos todas las precauciones y usaremos las herramientas apropiadas. En el caso de que no nos veamos capaces,  vale más desistir o pedir la colaboración de alguna persona más hábil o mejor preparada.

A continuación y con mucho cuidado, para no cortarnos ni dañar la semilla, iremos abriendo la dura coraza protectora que recubre la semilla. La coraza está formada por una concentración de las mismas fibras que tiene el fruto pero en una densidad muchísimo mayor que en el resto del fruto.

Preparamos una maceta grande colocando en el fondo una capa de cantos pequeños o cualquier otro material drenante, añadimos sustrato y plantamos la semilla recubriéndola con una capa de sustrato de unos 7 cm. Regamos abundantemente y colocamos la maceta en lugar soleado.

Tiene que tener una humedad constante, regaremos unas 4 ó 5 veces a la semana, pero no ha de estar encharcada. Y sol, cuanto más mejor, a las ocho semanas más o menos brotará la pequeña plántula del mango. Posteriormente, según su crecimiento, podemos ir cambiando de recipiente.