Cómo plantar y cuidar las bayas de café Artículo Publicado el 11.05.2023 por Flavia
Amo las plantas de doble propósito que son ideales para comer y atractivas o que tienen un propósito. A veces suelo encontrarme alguna planta que sirve tanto a la naturaleza como a mí y eso es lo que amo de la jardinería. Por ello, hoy te diré cómo plantar y cuidar las bayas de café, las cuales son dulces y jugosas y tienen muchos otros usos.
¿Qué son las bayas de café?
La Frangula californica es un arbusto de hoja perenne pequeño, mediano o grande que suele crecer entre 45 y 125 cm de altura, dependiendo siempre del cultivar.
Esta planta es una gran fuente de alimento para las aves, las mariposas y los insectos y se ha usado tradicionalmente por los nativos americanos con fines alimentarios y medicinales.
Parte de la familia de las bayas de café produce bayas que van del color verde al púrpura oscuro en verano, las cuales tienen un sabor dulce, similar al higo.
Mejores cultivares de bayas de café
Hay varios cultivares disponibles de bayas de café dependiendo del tamaño y los hábitos de crecimiento que precises. Si tienes mucho espacio en tu jardín, intenta cultivar cualquiera de los disponibles, pero si precisas un tamaño determinado es probable que quieras consultar en tu vivero local para que qué stock tienen.
Eva Case
Este cultivar crece entre 2 y 2,5 metros de alto y lo mismo de ancho. Sus hojas son de color verde vibrante. Pódalo para darle forma compacta.
Little Sure
Esta variedad es también compacta y tiene hojas de color verde oscuro. Totalmente crecido alcanzará 120 cm de alto y ancho.
Mound San Bruno
Este cultivar compacto es perfecto para cubrir el suelo o simplemente podrías dejar que crezca hasta su tamaño completo que es 150 cm de alto y ancho.
Propagando bayas de café
Hay dos formas de propagar las bayas de café: la primera es por semillas (la más efectiva y la que trataremos a continuación) y la segunda, por esquejes.
Semillas
La propagación de las bayas de café por semillas es un método simple. Aunque demoran en germinar y crecer, te aseguro que serás recompensado. Las bayas de café pueden vivir entre 100 y 200 años. Recoge las semillas de las bayas negras desde fines del verano hasta principios de otoño y enjuágalas bien.
Planta inmediatamente o mantenlas secas almacenadas en un recipiente hermético. Si estás listo para sembrarlas de inmediato, planta en macetas con tierra para cultivo de semillas de excelente calidad y mantenlas húmedas. Si prefieres secar las semillas para plantarlas más tarde, estratifícalas en frío.
Para hacerlo, sumérgelas en agua durante 24 horas. Colócalas en una toalla de papel húmeda y en una bolsa hermética. Mantenlas en el refrigerador durante tres meses.
Las semillas demorarán aproximadamente 45 días en germinar, pero tendrás que revisarlas cada dos semanas aproximadamente. Asegúrate de que no tengan moho y que la toalla de papel esté húmeda. Si está demasiado mojada o se está rompiendo, sustitúyela por una nueva. Vuelve a colocarlas en la bolsa sellable.
Una vez que hayan germinado, estarán listas para plantar. Cuando tengan entre 0,6 y 1,2 cm de largo, plántalas, pero ten mucho cuidado de no dañar el nuevo brote llamado radícula.
Utiliza un recipiente de al menos 12 cm de profundidad. Planta la semillas alrededor de 0,6 cm y cubre. Algunas personas tienden a colocar las semillas en la superficie.
Riega bien, sin saturar y deja que las semillas crezcan durante dos o tres meses antes de plantar afuera.
Cuidados de las bayas de café
Planta a pleno sol o a sombra parcial. Los que están al sol suelen ser verdes brillantes y los que están a la sombra suelen ser más oscuros. El suelo debe tener un buen drenaje, pero crecerá mejor en suelos arcillosos y arenosos. El Ph debe estar entre 5 y 8.
Aunque las bayas de café son tolerantes a la sequía, una excelente idea será cubrirlas para suprimir las malas hierbas y retener la humedad.
En su entorno natural, están rodeadas de mantillo de hojas de otros árboles, por lo que te propongo recrear eso.
Riega al menos dos veces al mes en verano durante los dos primeros años y, si llueve mucho, reduce el riego. Una vez que la planta se establezca, no deberás incorporar agua extra.