Cómo usar las bolas de arcilla en jardinería Artículo Publicado el 07.06.2013 por Javi
Las bolas de arcilla tienen múltiples usos en jardinería, la materia prima con la que se elaboran es la arcilla. Se cuece ésta a alta temperatura lo cual produce su expansión y dota a las bolas de sus principales características: ligereza, porosidad e inercia. Su origen 100% natural las hace apropiadas para su uso en agricultura ecológica.
Las cualidades de las bolas de arcilla las hacen recomendables en muchas situaciones, vamos a hacer un repaso de los posibles usos que podemos darles a estas pequeñas bolas de barro cocido.
Como relleno del fondo de las macetas las bolas de arcilla actuarán como un drenaje muy eficaz. Una capa de entre 2 y 5 cm en el fondo de la maceta en la que vayamos a plantar creará una excelente capa de drenaje. Opcionalmente se puede colocar un trozo de tela geotextil entre las bolas de arcilla y el sustrato que utilicemos.
Mezclando las bolas de arcilla con el sustrato en una proporción en torno al 10% aligerarán el sustrato, con ello conseguiremos que la circulación de aire sea mejor y que las raíces crezcan con mayor facilidad.
También podemos usar las bolas de arcilla como acolchado decorativo y funcional. Colocadas en la superficie del sustrato de una maceta de terracota quedan muy bien y al tiempo retienen la humedad del suelo al evitar la evaporación del agua.
Y si las colocamos en el plato de las macetas conseguimos que retengan el agua que escurre al regarlas y después la devuelven a la planta. Creamos así un ambiente húmedo muy apreciado por algunas plantas.
Las bolas de arcilla, porosas e inertes, complementan a la corteza de pino como sustrato para las orquídeas. Ayudan a regular el intercambio entre el agua y el aire que tan favorable es para estas epifitas. Antes de usarlas para este menester habremos de poner las bolas de arcilla en remojo.
Foto: gerbeaud.com
