Cortar las flores marchitas en verano Artículo Publicado el 26.08.2015 por Javi

Una de las tareas que muchos jardineros suelen olvidar en la estación veraniega es la poda de las flores marchitas. Hay que ser realistas y aunque nos pese reconocer que ya han terminado su ciclo ornamental y es mejor deshacerse de ellas tanto para que la planta presente un mejor aspecto como para promover una posible nueva floración. Después de que la flor se marchite, si ésta ha sido fertilizada, se formarán las semillas que buscan prolongar la vida de la especie. Bien, es una ley natural pero tal vez a nosotros no nos interese en este momento tener un mayor número de las plantas en cuestión.

En cambio podemos preferir que la planta florezca nuevamente y que reserve para ello sus energías. Pero también podemos dejar unas cuantas flores marchitas en la parte trasera de la planta, donde no se vean mucho a primera vista, para que se formen semillas y bien las recojamos y guardemos o bien dejemos que se produzca la reproducción natural de la planta.

Diariamente daremos un paseo por nuestro jardín e iremos retirando las flores marchitas, las grandes como geranios y petunias podemos cortarlas simplemente con las uñas de los dedos. Para las flores pequeñas usaremos unas tijeras. En ocasiones podemos cortar incluso un trozo del tallo para equilibrar el aspecto de la planta.

En el caso de las rosas este procedimiento es una parte importante de su cuidado pues las rosas marchitas roban gran parte de la energía de la planta frenando la producción de flor nueva. Las rosas las cortaremos siempre con unas tijeras de podar bien afiladas y desinfectadas. Si son rosas que crecen agrupadas podemos cortar sólo las marchitas o todo el grupo cuando ya no presente buen aspecto. En el caso de las monoflorales cortaremos cuando sea necesario y en ambos casos siempre desde un centímetro por encima del nodo desde el que parten.

Las plantas anuales también pueden ser objeto de este tratamiento pues si cortamos sus flores marchitas mejoraremos notablemente su aspecto y podremos forzar también una nueva floración. Normalmente necesitarán una vigilancia más intensiva, pues sus flores suelen marchitarse rápidamente, y usaremos para cortarlas unas tijeras afiladas.