Cuidados de la Erythrina o cresta de gallo Artículo Publicado el 25.06.2019 por Flavia
La Erythrina es un arbusto o árbol caduco o semi perenne que crece bien en lugares cálidos y soleados y que es originario de todos los continentes menos Europa. Sus 100 o más especies necesitan las altas temperaturas para crecer adecuadamente; pero, algunas de ellas que pueden florecer en condiciones frescas. Sigue leyendo para conocer todos los cuidados de la Erythrina.
La Erythrina cristagalli comúnmente conocida como el árbol cresta de gallo, es un arbusto de origen sudamericano que puede alcanzar casi los 2 metros de altura y el metro de expansión. Cada año aparecen nuevos brotes a partir de rizomas leñosos que exhiben una gran cantidad de hojas que se dividen en tres hojuelas. En primavera y verano el árbol se llena de grandes flores de color rojo intenso. Aunque no es difícil de cultivar, podrás obtener los mejores resultados en una posición soleada y protegida.
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Cuidados de la cresta de gallo
Cuando vayas a cultivar la erythrina, enriquece el compost con un poco de mantillo de hojas. Luego, cada año en invierno y primavera, realiza un cambio de maceta hasta llegar a una definitiva de 25 cm de diámetro. Después, cambia de recipiente o realiza un abono de superficie con compost fresco cada año.
Pon la erythrina en un lugar soleado y protegido del viento y riega libremente. Agrega un fertilizante líquido al agua cada 15 días desde el momento en el que aparezcan las flores.
Cuando llegue el otoño disminuye el riego y cuando se hayan caído todas las hojas, corta los brotes y los tallos a nivel de la tierra. Después cubre la planta con paja o turba y tapa con una tela de arpillera o manta de escarcha para proteger las raíces de las temperaturas muy bajas.
Cómo propago la erythrina
Si quieres propagar la erythrina o cresta de gallo, toma esquejes de 10 cm de largo a principios de la primavera e introduce los extremos del corte en hormonas enraizantes y después colócalos individualmente en macetas de 5 o 6 cm en una mezcla de partes iguales de turba y arena. Humedece la mezcla y mantén las macetas apartadas del sol directo a una temperatura de entre 21 y 24 grados centígrados; envuélvelas con una bolsa de plástico transparente. Cuando hayan aparecido las raíces, planta los esquejes de la cresta de gallo en el compost habitual.
Aunque la cresta de gallo carece de problemas, es importante que protejas sus raíces del frío intenso. Además, tienes que proporcionarle un lugar soleado y cálido para crecer. Por otra parte evita humedecer demasiado las raíces en invierno y rocía la planta con un insecticida con base de piretrina cuando aparezcan las hojas y las flores nuevamente, ya que al pulgón verde le encantan. La araña roja también podría parecer, por lo que tendrás que combatirla con un insecticida a base de malathion.