Cuidados de la Lewisia (Levisia) Artículo Publicado el 09.05.2018 por Flavia
La Lewisia es una planta pequeña semialpina que forma una roseta de hojas carnosas y proporciona una explosión de color durante el verano. La mayoría de estas plantas son siempre verdes, muy adecuadas para casas alpinas, aunque pueden crecer perfectamente en macetas o en cualquier otro recipiente. También puedes decorar con ellas el alféizar de una ventana. Existen aproximadamente 15 especies que constituyen este grupo de plantas originarias de Estados Unidos y que le deben su nombre al capitán Lewis, quien, junto con el capitán Clark, guió la famosa expedición que cruzó por primera vez Norteamérica desde St. Louis hasta la costa del pacífico.
Una de las especies más populares es la Lewisia cotiledón que forma una roseta de hojas carnosas, casi suculentas, siempre verdes y de 15 cm de diámetro. Sus flores tienen la forma de un embudo con 10 pétalos abiertos de color blanco o salmón, aunque a veces pueden ser rayados con rojo; surgen en verano.
Cuidados en primavera y verano
Cada primavera deberás trasplantar la Lewisia en macetas de 23 cm de diámetro, repletas de un compost rico, aunque también puedes preparar tu propia mezcla con partes iguales de turba, tierra negra y arena gruesa. Para que la Lewisia se desarrolle adecuadamente, es fundamental que utilices una tierra porosa y un recipiente con piedrecillas en la base para mejorar su drenaje. Es importante que cuides el drenaje de alrededor del cuello de la planta porque la Lewisia tiende a pudrirse durante los veranos y los inviernos muy húmedos; tapa la superficie del compost con una capa de guijarros, elevándola ligeramente alrededor del cuello de la planta para mantenerla seca.
Lleva la Lewisia en un sitio soleado y riégala regularmente durante su época de crecimiento, aunque nunca deberás hacerlo en exceso. Reduce la cantidad de agua hasta proporcionarle muy poca cuando la floración haya finalizado. Añade un fertilizante líquido cada tres o cuatro semanas durante la época de floración.
Cuidados en otoño e invierno
Deja la planta en un sitio soleado y protégela de la lluvia. Riégala solamente lo suficiente como para que el compost se mantenga húmedo. Asegúrate de que el cuello de la roseta de la Levisia esté sobre el nivel del suelo; si quedara humedad en este sitio, la planta podría pudrirse.
Como propagar la Lewisia
Divide los macizos en primavera y planta las diferentes partes en el compost que utilizas normalmente. Trátalas como plantas establecidas. Alternativamente, puedes sembrar semillas en primavera. Colócalas en la nevera durante tres o cuatro semanas antes de sembrarlas para que germinen mejor.
Disemínalas uniformemente sobre la superficie de la bandeja repleta de compost húmedo al que le has de agregar previamente un puñado de arena gruesa; después cúbrelas con arena. Cuando las plántulas estén grandes como para extraerlas de la bandeja sin dañarlas, plántalas individualmente en macetas de 8 cm de diámetro repletas del compost que utilizas normalmente. Llévalas a un lugar soleado, pero protegido. En la próxima temporada, tendrás que trasplantarlas a la maceta definitiva.