Cuidados y cultivo de la Clarkia o Godetia Artículo Publicado el 30.03.2020 por Flavia
Las flores de la Clarkia, también conocida como Godetia, obtienen su nombre de la expedición “Lewis y Clark”. El gobernador territorial, militar y explorador estadounidense William Clark descubrió la planta en la costa del pacífico de Norteamérica y trajo especímenes cuando regresó. No obstante, no se dio cuenta hasta que en 1823, otro explorador llamado William Davis, la redescubrió y esparció las semillas. Desde entonces, la Clarkia ha sido una de las flores más populares de las cabañas y los jardines de corte.
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La Clarkia es una planta de flores silvestres que crece de 30 a 90 cm de alto y se extiende de 20 a 30 cm. Florece en verano u otoño y, a veces, lo hace en inviernos, si el clima es dentro de todo templado. La mayoría de las flores de la Clarkia o Godetia son dobles o semidobles y viene en una amplia gama de colores.
Su cuidado, es realmente sencillo, y una vez que la plantas en el jardín, no hay mucho que hacer más que disfrutarlas. Sus flores se ven muy bonitas en contenedores, prados de flores silvestres, bordes de caminos, etcétera.
Cómo cultivar la Clarkia
Si vives en un área de clima frío, planta las semillas de Clarkia a principios de la primavera. Si vives en un área cálida, plántalas en otoño. Hazlo a 22 cm de distancia entre plantas.
Si quieres comenzar las semillas en el interior, utiliza macetas de turba para facilitar el trasplante. Siémbralas de cuatro a seis semanas antes de la última fecha promedio de heladas. Presiónalas sobre la superficie del suelo, pero no las entierres porque precisan luz para germinar.
Una vez que las hayas sembrado, encuentra un lugar fresco para ellas hasta que estén listas para trasplantarlas al aire libre.
Cuidados de la Clarkia
Las flores de la Godetia precisan un lugar con pleno sol o sombra parcial y suelo drenado. Ten en cuenta que no les gusta el suelo húmedo por lo que tendrás que regarlas regularmente hasta que estén establecidas. Después, serán tolerantes a la sequía y no precisarán fertilizantes.
Algo muy importante que no puedes olvidar es que los tallos de la Clarkia son débiles, por lo que se aconseja insertar algunas ramitas en el suelo alrededor de las plantas mientras son jóvenes y sujetarlas para que reciban apoyo.