Cultivo de cacahuetes en el jardín Artículo Publicado el 26.01.2015 por Carolina
La Arachis hypogaea es una planta herbácea, que puede llegar a alcanzar los 70 centímetros de altura, que está compuesta por unos tallos peludos, gran cantidad de ramas (que aparecen desde la base y desde las que se generan raíces y, por tanto, nuevos ejemplares).
La planta del cacahuete florece generando ejemplares de color amarillo brillante desde la que se crea el fruto. Éste es una legumbre subterránea, oblonda, de paredes gruesas, reticuladas y veteadas. Popularmente se conoce con los nombres de cacahuates, avellanas o de maní.
Sus semillas son de color blanco aunque tienen una piel de color rojizo. Su sabor y propiedades son muy apreciados en repostería, para obtener aceites, preparar un sucedáneo de café, realizar una sopa típica de Bolivia y para su consumo en crudo tras haberlos tostado. También se usa la cáscara como combustible para calderas y para alimentar al ganado.
El cacahuete se cultiva desde hace 8.000 años aproximadamente. Los primeros en hacerlo fueron los primeros pobladores del continente americano habiéndose encontrado vestigios en la zona andina de Perú. Su siembra se realiza a principios de la primavera y se recogen en el otoño.
Los cacahuetes son plantas que arraigan con facilidad, por lo que es fácil plantarlas. Si queremos plantar cacahuetes en nuestro jardín o una maceta debemos tener en cuenta de lo siguiente:
- Para obtener nuevos ejemplares basta con plantar cacahuetes sin tostar.
- Hay que plantar la semilla a unos 3 centímetros de profundidad, en surcos separados de 40 a 50 centímetros. Hay que colocar dos semillas por cada mata.
- El cacahuete requiere un suelo con unas características muy particulares: estructura suelta, fértil, bien drenado, alto contenido en calcio, fósforo y potasio.
- Es necesario mantener el suelo húmedo.
- Requieren mucha luz y calor, por eso crecen mejor en zonas cálidas.
- Pueden plantarse en interior y en exterior. Si optamos por la segunda opción debemos poner el ejemplar en un sitio protegido de las heladas y de las corrientes de aire.
- Se deben eliminar las malas hierbas de manera frecuente para evitar la competencia por los nutrientes.
- Tras su cultivo debe plantarse otra variedad ya que el cacahuete empobrece el suelo. De ahí que sea necesario aportar nutrientes, como los fosfatos, el potasio y el calcio al suelo en el que se encuentran.
La principal plaga que sufre el cacahuete es la marchitez bacteriana.
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