Cultivo del romero de pantano Artículo Publicado el 24.11.2015 por Javi
Este modesto arbusto está captando cada vez más la atención de muchos aficionados y profesionales de la jardinería. El romero de pantano o Andromeda polifolia pertenece a la familia de las ericáceas como el brezo por ejemplo. Crece espontáneamente en las turberas de las zonas frías del hemisferio Norte.
Es un arbusto enano que puede crecer como mucho hasta los 50 cm de altura y unos 60 cm de envergadura y ello cuando se trata de variedades de cultivo ornamental ya que el romero de pantano silvestre apenas llega a los 20 cm de altura.
Los tallos y las ramas son finas y cuentan con hojas estrechas, alargadas y correosas muy parecidas a las del romero, de ahí su nombre popular.
En primavera se llena de racimos de flores de un vivo color rosado. Las flores tienen forma de campana y recuerdan mucho a las del madroño, de hecho forman parte de la misma familia.
El follaje es de un verde grisáceo en primavera y se vuelve más oscuro en verano adoptando un tono azulado. Aunque hay algunos cultivares en que las hojas adoptan una coloración todavía más azulada como el ‘Blue Ice’ canadiense.
El romero de pantano requiere una exposición soleada aunque puede tolerar la sombra parcial. Le gustan los suelos ligeros, frescos y ricos en humus. Preferiblemente que sean ligeramente ácidos. No tolera en absoluto los suelos calizos.
Necesita, por sus características, un buen grado de humedad en el suelo. Por eso será conveniente acolchar el suelo para evitar la rápida evaporación del agua y regar regularmente sobre todo en los periodos de sequía. Aquí vemos sus frutos que consisten en unas pequeñas cápsulas que contienen las semillas. Éstas servirán para su reproducción aunque es fácil hacerlo también por esquejes. Esta planta contiene un principio activo tóxico, grayanotoxina, que puede producir efectos adversos para la salud.
