Espárragos, recolección y consumo Artículo Publicado el 10.04.2013 por Javi
La primavera es la estación de los espárragos por antonomasia, es el momento de la recolección de los brotes tiernos de Asparagus officinalis. La primavera también es la estación para cultivar los espárragos, a comienzos de la estación es el momento idóneo. La planta necesitará tres años en producir brotes comestibles.
Aunque después tendremos espárragos durante diez años con dicha plantación. En el mercado podemos encontrar tres tipos de espárragos cultivados:
- Espárrago blanco: En realidad es producto de un proceso denominado blanqueo, que consiste en privar al brote de la luz solar.
- Espárrago morado: Se recubre el brote de tierra pero dejando la cabeza o extremo del espárrago al aire. Se cosecha un poco más tarde, el cuerpo es blanco y la cabeza de color ligeramente morado.
- Espárrago verde: Todo el brote ha estado expuesto a la luz solar y por lo tanto no se ha inhibido la fotosíntesis y el brote es totalmente verde.
Los buenos espárragos deben ser rectos y lisos, tener las escamas de la cabeza cerradas y no tener ninguna mancha en el cuerpo del brote. Además deben tener un color intenso y brillante. Los espárragos deben consumirse en el día de la recolección o como mucho a los dos días, entonces los guardaremos en la parte baja del frigorífico envueltos en un trapo húmedo para que no se deshidraten. Cocidos acompañados de una buena mayonesa o en revueltos con huevos y otros ingredientes, los espárragos dan mucho juego en la cocina y hay infinidad de recetas para consumirlos. Sus cualidades depurativas y diuréticas los hacen muy recomendables para consumir en primavera cuando necesitamos limpiar nuestro cuerpo del acúmulo de toxinas del invierno.
Foto: rustica.fr