Guía de jardinería

La Hydrangea paniculata es una especie de hortensia. Aunque conocida desde antaño pareció perder el interés de los jardineros durante bastante tiempo. En cambio en estas dos últimas décadas parece que ha vuelto a captarlo por todo el mundo.

La hortensia paniculata es más fuerte y resistente que la hortensia común. Aunque a veces no se la considera adecuada para jardines pequeños por el gran tamaño que alcanza el arbusto, hasta 4,5 m aunque normalmente rondan los 2 m . Pero hay cultivares de menor tamaño que tienen cabida en cualquier jardín. Es el caso del ‘Dharuma’ y el ‘Quick Fire’.

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Las hojas de las hortensias son el principal blanco de las enfermedades, por ello conviene reconocer los daños habituales que presentan esta parte de la planta para poder tratarlas adecuadamente.

Las principales dolencias que sufren las hojas de la hortensia son las siguientes: el oídio, la mancha foliar por cercospora y la antracnosis.

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Las hortensias son unas de las flores favoritas de muchos jardineros. Si quieres introducirte en su cultivo o aprender algo más sobre el tema tal vez te venga bien echarle un vistazo a este modesto artículo. Tienen fama de ser difíciles de cultivar y de ser bastante exigentes en cuanto a sus necesidades. Bien, en parte es cierto cuando hablamos de la variedad clásica más cultivada,  la vieja H. macrophylla, pero ahora podemos encontrar variedades para casi cualquier clima y suelo.

Necesidades lumínicas 

La mayoría de las hortensias se llevan bien recibiendo el sol directo por la mañana y quedando resguardadas a la sombra por la tarde. Los climas demasiado calurosos no les sientan muy bien. Los climas con veranos suaves son los perfectos para ellas. Demasiado sol o demasiado poco pueden afectar seriamente a su rendimiento. Pero como decíamos hay variedades para cubrir casi cualquier necesidad. Hay tipos de hortensias que crecen muy bien en sombra parcial y otras que soportan mejor el calor.

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Las hortensias sufren el ataque de diferentes plagas que pueden acabar con la planta. Para que esto no ocurra os orientamos sobre las plagas más habituales y los remedios que podemos aplicar para mantenerlas a raya.

Ataque de hongos

• Los hongos que suelen atacar con más frecuencia a las hortensias son los nematodos. Estos pequeños animales tienen un aspecto verde, son largos y viven en la tierra.
• Podemos localizarlos cuando la planta tiene un escaso desarrollo y presenta úlceras en el tallo y una floración irregular.
• Uno de los hongos más dañinos es la roya. Deja manchas anaranjadas bajo las hojas de las plantas adultas.
• No es sencillo que este animal desaparezca, por lo que debemos recurrir a soluciones drásticas como la limpieza de las raíces y la posterior sustitución del sustrato (en el caso en el que la planta esté en maceta), o el empleo de un insecticida específico (nematocida granulado), si es que la planta se encuentra en espacios abiertos.

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Las hortensias son conocidas y apreciadas por los jardineros por su espléndida floración. Espléndida en múltiples factores, tamaño de la flor, cantidad y colorido. Pero en ocasiones presentan problemas y su floración se acorta y reduce considerablemente. Vamos a ver algunos consejos de expertos en la materia que nos pueden ayudar a que estas magníficas plantas nos den el mayor número posible de flores y durante el mayor periodo de tiempo en que sea posible.

Como primer consejo, los expertos nos recomiendan que no nos dejemos llevar por el mercantilismo propio de los viveros y averigüemos a priori si en la zona donde vivimos puede crecer bien esta planta.

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La belleza de las hortensias no tiene comparación. Son una de las grandes elegidas en la jardinería y no enamorarse de ellas es casi imposible. Son ideales para añadir color, estructura y profundidad en el jardín. Es una planta tan fiel que cuidarla no requiere de grandes esfuerzos, siempre y cuando nos aseguremos de darle las condiciones mínimas que requieren para crecer y mantenerse saludables.

Este arbusto de crecimiento medio tiene una muy buena tolerancia al frío, pero es bueno ubicarlas en un lugar que estén protegidas en las horas de mayor sol si es que vivimos en una zona de veranos severos.

Sus preciosas flores pueden disfrutarse tanto en primavera como en verano. Es por ello que es ideal para añadir ese toque de color que tanto nos gusta para disfrutar de nuestros espacios exteriores como interiores. Son muy buenas para decorar y crecen muy bien tanto en suelo como en jardinera.

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