Guía de jardinería

ROMERO (Rosmarinus officinalis)

Perteneciente a la familia de las Labiadas, el romero es un arbusto ramificado perenne, que puede alcanzar los 2 m. de altura. Sus hojas son lineales, en forma de aguja (oscuras por el dorso y plateadas pr el revés) y por sobre todo, muy aromáticas. Su nombre procede del latín ros (rocío) y marinus (marino), ya que era conocida or habitar y perfumar los acantilados costeros. Sus flores, de un azul muy pálido, nacen a mediados del verano, en el encuentro de las hojas con el tallo. Este conocido afrodisíaco, es un fortificador del corazón, sobre todo en casos de debilidad y palpitaciones cardíacas. Se toma en infusión de 30 g. de romero por cada litro de agua.

JENGIBRE (Zengiber officinalis)

Esta planta que puede consumirse tanto fresca, seca como confitada, posee un sabor característico, algo picante. Los cocineros de Madame du Berry preparaban una mixtura de yemas de huevo y jengibre que inducía a los amantes de la cortesana al una lujuria desatada. La raíz joven y pelada, estimula la circulación y es tremendamente usada en la cocina oriental.

DAMIANA (Turnera Afrodisíaca)

La damiana se trata de un pequeño arbusto muy conocido en México y América tropical como afrodisíaco desde los tiempos de los mayas. Es el día de hoy, que las tribus indígenas la usan, en infusiones que toman cada dos horas, en el día del coito sexual.
Se puede encontrar en forma de comprimidos, tintura madre, extracto y planta troceada. Si se maceran 30 gramos de hojas en un litro ed tequila durante una semana, se obtiene un licor afrodisíaco.

APIO (Apium graveolens)

Cuenta la historia, que la marquesa de Pompadour inventó una sopa de apio para avivar las cenizas de la pasión que tiempo atrás había tenido por ella el Rey Luis XV. Aún así, la fama de afrodisíaco de esta verdura viene de tiempos inmemorables, de la Roma Antigua. El apio limpia las arterias y deja fluir mejor la sangre. Además, contiene feromonas.

Desde tiempos remotos, las culturas han buscado en la naturaleza sus sustancias para seducir a sus seres amados, estimular la sexualidad y potenciar la fertilidad. Los griegos, fueron los primeros en conocer y comprobar el erotismo que generaban algunas plantas. Siempre se dijo que Afrodita , que había surgido de la espuma en el siglo VI a.C, sabía preparar filtros y pócimas para hacer llegar al delirio a sus amantes. La primera menció acerca de los afrodisíacos la hicieron los egipcios, pero hay citas en la Biblia y el Kama Sutra. En tanto en China, el gingsen es la planta más poderosa para vigorizar a los amantes, y los árabes les atribuían a las fragancias el poder de ser potenciadores sexuales.
Ahora te interesa saber el secreto de las plantas afrodisíacas??? Es el alto contenido en vitaminas A, B, C y minerales como el hierro, litina, magnesio y zinc, esenciales para disfrutar una vida sexual plena.

AJO (Allium sativum)

En la antigüedad se creía que el ajo era una planta sagrada, erótica, medicinal y reconstituyente, por eso era consimido por todos los atletas de Grecia. Aunque, su mayor cualidad, es que ayuda a mantener el organismo saludable. Está comprobado que el ajo aumenta la energía vital, lo que se traduce en mayor rendimiento sexual. Además, tras consumir ajo, se produce un calentamiento corporal que invade al organismo. Su problema: el olor que impregna hasta la piel, por lo que se aconseja que lo consuman ambos amantes.
Un dato curioso: la sustancia que genera mal olor en el ajo, es la misma que está presente en las secreciones íntimas.