Guía de jardinería

La rademarchera se cultiva como planta de interior por su decorativo follaje de color verde. Aunque en realidad se trata de un árbol perennifolio originario del sudeste de China y de Taiwan. En su medio natural, la Rademarchera Sinica, puede alcanzar los 30 m de altura y 1 de diámetro el tronco. En cambio cuando la cultivamos fuera de su medio puede quedarse en medidas mucho más discretas. Habitualmente medirá entre 50 y 120 cm de altura. Las hojas de la rademarchera tienen forma acorazonada con el ápice muy alargado y puntiagudo.

Aunque sus flores son grandes y muy llamativas, en forma de trompeta y de unos 7 cm de longitud, generalmente sólo florece en su lugar de origen o si se cultiva en invernadero manteniendo estrictamente sus necesidades cubiertas. Tras la floración desarrolla un fruto en forma de cápsula que contiene las semillas.
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Cultivar plantas tropicales y cultivar plantas de interior son prácticamente sinónimos. En la mayoría de ocasiones, las plantas de interior que se cultivan en zonas geográficas alejadas del trópico son precisamente plantas tropicales. En el interior de hogares y oficinas es donde encuentran la temperatura ideal estas plantas acostumbradas a vivir en lugares cálidos y húmedos. De esta forma podemos tener en casa, en la oficina o en cualquier otro lugar un verdadero jardín tropical.

En cualquier edificio estas llamativas plantas de gran porte y espectacular follaje encuentran esos 15-25ºC de temperatura que necesitan para sobrevivir decentemente. Otra cosa es el tema de la humedad pues ellas por lo general están acostumbradas a una humedad ambiental de un 80% y claro está esa tasa no la encuentran en ningún lugar, usualmente la tasa de humedad en nuestros hogares es mucho menor, entre 20 y 60%. Decorativas y colaboradoras en la limpieza del aire, las plantas tropicales son unos huéspedes muy recomendables como este pequeño bosque de kentias, Howea Forsteriana.
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Cuando te acostumbras a usar hierbas aromáticas frescas en tus platos la verdad es que no puedes prescindir de ellas ¡son tan diferentes a las secas! Pero cuando llega el otoño hay que prepararse para pasar todo el invierno sin tus queridas hierbas aromáticas. Aún hay una solución y es la que queremos proponeros en este artículo, el cultivo de interior de algunas de las hierbas aromáticas más populares, cinco en concreto que no pueden faltar en nuestros platos más suculentos.

Con estas cinco aromáticas tienes el éxito asegurado en su cultivo en interior, hay más por supuesto que se pueden cultivar dentro de casa pero éstas en particular son las más fáciles de mantener y que mejor se adaptarán a su cultivo en interior.

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A todos nos gusta tener plantas en casa, o a casi todos, pero no siempre nos atrevemos a ello por haber fracasado en experiencias anteriores o no vernos suficientemente cualificados para la tarea. Bien, dejemos esas ideas negativas y comencemos con buen pie en la gratificante experiencia de criar plantas de interior. Y para ello nada mejor que saber por dónde comenzar, lógicamente por las plantas más fáciles y que menos quebraderos de cabeza nos van a dar.

Hemos recogido estas siete especies que de seguro os van a dar grandes satisfacciones por su facilidad de mantenimiento y su resistencia. Por supuesto que hay muchas más posibilidades pero es importante comenzar las nuevas aventuras de forma pausada y sin querer abarcar demasiado. Siete es un buen número, el de la suerte, para tener suficiente variedad de plantas en interior, al menos al principio por supuesto.

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La nolina, Beaucarnea recurvata, aunque se pueda confundir con una palmera es en realidad una planta de la familia de los ágaves. Originaria de México puede alcanzar en su entorno natural o en un clima cálido hasta 10 metros de altura. Ello no impide que se cultive frecuentemente en interior pues es una planta muy resistente y de crecimiento lento.

En cultivo de interior suele crecer normalmente hasta el metro y medio, se usa para decoraciones minimalistas y de estilo moderno. No ramifica apenas y presenta un tronco con un abultamiento muy característico en la base. Es donde acumula las reservas de agua para sobrevivir a las sequías.

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La zamioculca es una planta originaria de África, Zamioculca zamicifolia, que aunque conocida científicamente hace más de un siglo lleva apenas una década comercializándose. Se trata de una planta muy resistente pero de crecimiento muy lento. Así que mejor adquirirla en un centro de jardinería si no queremos desesperarnos con su lento crecimiento.

Es una planta especial para interior, su temperatura ideal se encuentra alrededor de los 21º C y no tolera bien temperaturas de menos de 3º C. La podemos tener en un lugar soleado o en sombra, ella no es muy exigente. Los riegos pueden dilatarse bastante en el tiempo y siempre hay que esperar a que la tierra de la maceta se seque por completo antes de regar. Tolera bien la sequía pues es una planta que almacena agua en los tubérculos y en sus gruesas hojas carnosas.

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