Las suculentas tienen colores variados, flores súper llamativas, formas inusuales y ricas texturas. Desde geométricas hasta curvilíneas, sutilmente manchadas y hasta con rayas audaces. Lo que tienen en común todas ellas son las hojas y los tallos carnosos y la capacidad para retener agua. Sigue leyendo para conocer 5 suculentas exóticas fáciles de cuidar.
Amo cultivar suculentas en mi jardín porque no requiere demasiado esfuerzo de mi parte para mantenerlas en buen estado. No obstante, he descubierto que muchas de las plantas crasas que he plantado tienen un color muy similar, por lo que consultando en el vivero he aprendido que existen suculentas coloridas que pueden darle un nuevo aspecto a mi jardín y hacer que luzca impresionante. ¡Vamos a echarles un vistazo!
Las suculentas se encuentran entre las plantas más fáciles de cultivar. Son maravillosas e ideales para los nuevos jardineros, pues no precisan mucha atención. Sin embargo, suelen tener problemas ocasionales, por lo que saber revivir una planta suculenta que se ha descuidado es una parte importante de su cuidado.
Las suculentas se dispararon en popularidad en los últimos años debido a sus divertidas formas, su bajo mantenimiento y su agradable estética. Seguramente, has de conocer muchas, pero quizás nunca hayas visto a la suculenta delfín (senecio peregrinus), también conocida como cadena de delfines. Si has estado buscando una nueva planta de interior para cuidar, esto es lo que precisas saber para cuidar la suculenta delfín. ¡Toma nota!
Las suculentas pueden cambiar de color durante todo el año en función de varios factores como el calor, el agua, los fertilizantes, el suelo, etcétera. Al igual que otras plantas, las suculentas absorben agua y dióxido de carbono y los convierten en glucosa y oxígeno mediante la fotosíntesis. Durante este proceso, los pigmentos juegan un papel fundamental. Sigue leyendo para saber por qué las suculentas cambian de color.
Las suculentas producen tallos y hojas gruesas y carnosas que almacenan nutrientes y humedad. Esto les permite a las plantas que prosperen en condiciones secas. Las suculentas en macetas requieren menos cantidad de riego y fertilizantes que otras variedades de plantas de interior, pero el riego que precisan elimina los nutrientes del suelo, por lo que sí hay que alimentarlas periódicamente. No obstante, mucho fertilizante, en especial las mezclas con alto contenido de nitrógeno, incrementan los problemas de pudrición de las hojas y las raíces. Es vital utilizar la combinación adecuada y evitar la sobrealimentación para mantener las suculentas lo más saludables posible.
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