Reproducir apio de forma divertida Artículo Publicado el 15.07.2014 por Javi

Siempre es buen momento para introducir a los pequeños en los misterios de la vida y ahora que están de vacaciones podemos estar más tiempo con ellos. Pequeños experimentos como el que os proponemos les enseñará mucho sobre el reino vegetal. Aprovechando los desechos de la ensalada podemos rescatar un tallo de apio y hacer que vuelva a crecer de nuevo.

Con unos 5 centímetros de la base del tallo nos bastará. Lo colocamos en un recipiente plano y echamos agua para que cubra la base del tallo, justo por la zona donde tiene el tronco principal y donde antes tenía las raíces. Dejamos el recipiente con el tallo en un lugar soleado.

Les diremos a los chicos que deben fijarse en el pequeño grupo central de pequeños tallos amarillentos pues es ahí donde va a obrarse este pequeño milagro de la vida. En un par de días ya comenzaremos a apreciar cambios en ese grupo central.

Si el ambiente todavía es fresco en nuestro lugar de residencia podemos preparar un pequeño invernadero con una tapa plástica. El tallo debe recibir la mayor cantidad de luz solar posible y encontrarse en un ambiente cálido. Pero tampoco debemos permitir un calor excesivo que resecaría el tallo en exceso. Y vigilaremos constantemente el nivel de agua en la base de los tallos.

En tres semanas se habrán desarrollado un grupo de tallos y hojas partiendo del centro del tronco y podremos proceder a transplantar el tallo rebrotado a una maceta o en el suelo directamente. El apio debe mantenerse en perfectas condiciones de humedad y calor para que no sufra. Un poco de sombra y riego adecuado ayudarán a ello. Es un fácil experimento que puedes hacer en compañía de tus pequeños, seguro que les va a encantar.