Un pequeño jardín en San Francisco Artículo Publicado el 03.12.2012 por Javi
El jardín que presentamos está situado en el barrio de Noe Valley de San Francisco, en este barrio situado en el corazón de la ciudad se encuentran la mayoría de esas casas del siglo XIX que se han convertido en iconos de San Francisco. Estas casas, con su solar estrecho y alargado, no suelen disponer de mucho espacio para el jardín. Así le ocurre a la casa donde se encuentra el jardín que os mostramos, pero su diseño hace que la sensación de espacio sea mayor.
Se ha creado una sala de estar aprovechando el abrigo del muro y la fuente situada en alto en el murete de la derecha. Este pequeño recoveco crea un entorno de privacidad ya que no puede verse desde la casa.
El jardín se divide en «cuatro salas de estar» y cada una tiene un cultivo especializado. Esa división en zonas, ocultas unas de otras, contribuye a crear la sensación de amplitud.
En el comedor al aire libre, los bloques de hormigón reposan sobre la gravilla, su alineación un tanto descuidada crea una ilusión de naturalidad. La excesiva geometría de las líneas siempre hace ver la mano del hombre, en cambio si dejamos los bloques separados y sin respetar la alineación parece que sea más natural.
La Hardenbergia violacea, tratada aquí como una trepadora se apoya delicadamente sobre la pared. Este arbusto perenne exuberante y espeso se ha domesticado en esta ocasión para dar una imagen más etérea.
Se ha construido un muro con botellas vacías de vino para ocultar a la vista otro de los secretos reductos del jardín. Con la luz del sol el muro de vidrio lanza destellos de brillantes colores que alegran el jardín.
Una clemátide de hojas perennes se levanta junto al muro de la casa y …
… crea una enramada para los visitantes que caminan por el sendero. La clemátide sigue su camino, creando un techo de sombra sobre la terraza del primer piso en la parte trasera de la casa.
Fotos: gardenista.com