Zoysia tenuifolia como alternativa al césped Artículo Publicado el 02.05.2016 por Javi
Esta hierba perenne de crecimiento rastrero y originaria de las islas Mascareñas, en el Océano Índico, es una magnífica alternativa al césped tradicional. Ideal para lugares cálidos y con bajas precipitaciones requiere mucho menos mantenimiento y sobre todo agua que el césped. Vemos la zoysia tenuifolia como alternativa al césped que nos hará disminuir la cuenta del agua y del tiempo para su cuidado.
Sus hojas son muy finas y crecen en mechones aterciopelados muy agradables de pisar incluso con los pies desnudos. De hecho en inglés se la conoce como «Korea velvet grass». La zoysia tenuifolia soporta temperaturas de hasta -10ºC aunque suele amarillear antes incluso. Para un clima de tipo mediterráneo con inviernos suaves resulta perfecta. Resiste muy bien la sequía y es de lento crecimiento con lo que es muy fácil de mantener. También tolera bien que se la pise así como el riego por aspersión, es una hierba con una buena capacidad de adaptación.
Crece bien a pleno sol y sus necesidades en cuanto a suelo tampoco son muy exigentes, crece bien sobre cualquier tipo de suelo siempre que sea seco y bien drenado, incluso sobre los ligeramente arenosos. Tampoco importa el pH del suelo, lo único a evitar son los suelos húmedos.
Actualmente se encuentra en los viveros, al igual que el césped tradicional, en placas y rollos. Aunque también puede cultivarse desde semillas o plantones de semillero al ser de crecimiento muy lento nos llevará mucho tiempo conseguir una buena cobertura. Desde luego lo más práctico es decantarse por el primer sistema de cultivo. El suelo debe prepararse igual que para el cultivo del césped y el mejor momento del año es en la primavera.
Aunque la zoysia necesita dos o tres veces menos agua que el césped hemos de tener cuidado en los dos primeros años del cultivo. Regaremos regularmente para asegurarnos que se forme una espesa alfombra verde. En cuanto a la fertilización también es menos exigente que el césped, se puede usar el mismo fertilizante pero dividiendo la dosis típica por tres.
Al ser de crecimiento lento y sus hojas no superar los 5 cm de altura se puede dejar sin cortar formando armónicas ondulaciones o cortarlo cuando lo precise que no serán más de 2-3 veces al año. Escarificar el suelo una vez al año le irá bien para que se oxigenen las raíces. En primavera se puede dividir la mata para multiplicar la planta.